Interesante desafío
foto: Sheila Tatiana Castañeda Useche
por: Sheila Tatiana Castañeda Useche
Sí, que bien lo dice es un gran reto pues en el mundo en el que se vive con tanta rapidez, con tantos temas y esferas sociales que nos rodean y además con tanto conocimiento e intereses, se convierte en que no solo seamos competentes en lo que hagamos en la vida laboral, familiar y personal sino que todo lo que hagas siempre sea impreso con buena voluntad, con ánimo, con viveza pero ante todo actuando coherente en nuestra emocionalidad.
Analizando cada espacio y no permitiendo que nuestras palabras sean ondas vibratorias que afecte o perjudiquen a alguien sin que de verdad se merezca alguna amonestación.
Por ello el gran desafío Aristotélico: “Cualquiera puede ponerse furioso… eso es fácil. Pero, ponerse furioso con la persona correcta, en la intensidad correcta, en el momento correcto, por el motivo correcto y de la forma correcta… eso no es fácil.” Es una reflexión que debe estar anclada en nuestras mentes al momento de explotar nuestras emociones.
Ciertamente la semana pasada estaba escuchando en el programa radial de Minuto de Dios, Temas de Pareja con Mauricio Pareja, quién nos explicaba abiertamente que en si la ira no es mala es mala cuando esta o se reprime demasiado o se explota casi siempre sin bases. Es por ello que nuestra integridad debe también contar con los espacios, personas y palabras correctas para que la comunicación sea asertiva y efectiva, para que los procesos no se estanquen ni se compliquen si no que sea manejado desde un razonamiento sacado nuestras emociones en la medida correcta.
Si bien a tod@s nos ha pasado que actuamos mal que descargamos quizás en la persona incorrecta pero así mismo como somos capaces de fallar debemos centrar la emocionalidad en corregir en abrir espacios de verdadero diálogo y aclarando cualquier tema.
Interesante... un tema que desde mucho antes viene haciendo énfasis en ser pacientes en saber detenidamente cuando se va a hablar e incluso a actuar. Pues tod@s llevamos un duelo, una meta, un proyecto de vida que debe ser respetado y no ser destruido por no saber manejar las emociones. Por eso no dejes que los demás dañan tu vida. Controla, piensa, habla, actúa y se aterrizado.
No dejes que la emocionalidad nos controle!.
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